salud!

por el puto stress

por sentirme como las pelotas

por ke a pesar de toda la mierda.. Siempre hay una o dos personas ke sacan la sonrisa ke me gusta llevar en la cara

por los buses, y por las señoras con guagua en los buses y por la viejitas ke te encaletan al nieto en los buses y por los auxiliares jotes de los buses

por ke el viernes nos veamos muchos y lo pasemos como nunca

por ke el jueves reencuentro full family friends

por ke mañana salgo de un cacho y entro en 326478352 mas

por la gente que extraño

por la gente extraña

por los genios y personalidades de mierda

por ke tengo sueño desde hace un mes

por ti.. por mi.. por todos


por no ser yo misma, por tratar de ser yo, por ke me ayudas siempre a encontrarme con migo

por kerer inyectarme, fumarme, jalarme mil cosas y aún así no hacerlo


por ke me fue como las reverendas en una.. y de las mil maravillas en otras

por el balance, el puto balance ke se kiebra dia a dia y se recupera dia a dia

por ser fanaticos del generalams

por no perder el poder de toyo aunque no tenga idea de que estoy hablando

por terminar de una vez por todas el bendito capitulo del libro de Fisio

por todo, por nada

por la sopa de fideos y por la retencion del arroz para unos pocos

por ke el dia del "##&%#%" piñera presidente xD

por ti otra vez...

por ke no he visto las noticias desde hace dos meses

por que tengo demaciadas ganas de leer un buen libro y con suerte me da el cerbro para leer el reverso del boleto de la micro

por que en concepcion se justifica que a las micros las llamemos micros (el tamaño si importa señores, cuando lo asumiran?)

salud por que en unos dias regreso a mi casa

salud por que en otros tantos regreso a mi otra casa

por que no puedo estar mas feliz del cansancio que siento de lunes a jueves despues de las practicas


salud.. POR MI

Él camina lento

Él camina lento, da pasos infinitos sin prisa, pues hoy, nada le preocupa.
Él mira cada persona que cruza su camino, él las observa, las analiza, las ama, pues hoy está dispuesto a aprender de todos los gestos, de todas las miradas que los sin rostro puedan proporcionar,
Él es conciente de que miles de sin rostro lo rodean, millones de persona, de mentes, de pensamientos y sentimientos, pero hoy y por primera vez, esto no le importa, no lo angustia, no lo ahoga.
Él camina lento, camina sin prisa, y respira profunde el vaho fétido de la ciudad sin luz, el mismo vaho que con los años se ha impregnado en su piel, logrando ser también su olor, su hedor. Él disfruta la sombra de los rascacielos, y se regocija en los espacios iluminados por los carteles de neón, hoy por primera vez no le preocupa ninguna estructura, pues hoy nada puede quedar fuera de su sitio, no, hoy nada puede caer o derrumbarse, no hoy.
Él aprecia todos los matices del gris y del negro que desprende el asfalto bajo sus pies, se entretiene con su sombra, y se admira de la gama de colores que rodea su caminar, los reflejos en los vidrios de las galerías, y continúa su camino tranquilo, lento y sin prisa.
Y es que hoy, solo hoy, se dio cuenta de que en realidad no importa que dirección tome, que medio utilice, que velocidad alcance, hoy es conciente de que sus pasos lo conducen a la nada, a la infinita oscuridad del vacío sin fin ni comienzo. Hoy se da cuenta de que realmente, mucho antes de nacer, ya estaba muerto.

El Viejo

Y así el viejo cada noche nos cobijaba con su voz de miel y lijas ya gastadas, aquella voz que tenía notas de tiempo, décadas vividas, esforzadas, trabajadas, explotadas, décadas olvidadas, por decisión o por edad, o simplemente por la falta de fuerzas para revivirlas, nos acariciaba de manera fuertemente sutil, y el aroma de la antigua casa nos envolvía con una mezcla de tabaco, canela y naftalina, el gato en el fondo, y nuevamente la voz del viejo, contando historias mil veces contadas, de valientes héroes que sufrían por el amor de sus mujeres, por amor a sus patrias, a sus creencias y princesas de antología en castillos encantados o pocilgas olvidadas y corroídas, de viajes, de familias, de exilios y fantasmas, mientras la abuela calentaba en el fogón a leña la leche que terminaría por dormirnos.
Y es que no existe otra manera en la que pueda recordar al viejo “no me gusta que me diga abuelo, ni menos tata, ¡nosotros no somos na mah que parientes pué!, somos amigos, así que nada de tatita en mi casa, o Luís o viejo”, y como en la familia Luises hay muchos (incluyéndome) quedo como viejo el viejo.
Y mas que recordar al viejo como imagen, lo recuerdo como concepto, el viejo de las mil y una historias de mi infancia, el viejo de los coscorrones y retos, el viejo que podía convertir la casa en un palacio o en una trinchera, el viejo que no terminó nunca el octavo básico y sin embargo, el mejor historiador de la tierra. Ese viejo que trabajó en lo que se pudo, por que la eñora era regodeona y los hijos tenían que estudiar, ese viejo que según mi padre lloró a mares con el nacimiento de su primer nieto (yo mismo), ese viejo fuerte por fuera e infinitamente niño por dentro.
Salir a su casa era llegar a un refugio, regaloneos, cuentos, y un momento de seriedad, entrar en su casa era entrar en uno mismo, pues cada personaje era nada mas ni nada menos que cada uno de sus nietos, tanto así nos conocía el viejo que podía abstraer nuestras vidas a los tiempos de dragones y espadas, o llevarlas a un futuro lejano de autos voladores y mujeres de piel color azul. “hijo tiene que estudiar, pa que no sea guaso y menso como uno” si el viejo me viera hoy, en mi casa, con mi esposa, con mis hijos, si mi querido viejo me viera, dedicándole unas cuantas líneas en la historia tras su muerte ya pasada, recordándolo no como inferior sino como ejemplo, si solo el viejo me viera, o mejor dicho, si solo yo pudiera verlo a él.
El viejo se fue una mañana fría, una mañana en que la luz no penetro jamás la triste habitación, el frío de la muerte próxima me envolvía mientras sostenía su mano, y él no paraba de tiritar. “tranquilo viejo, que el frío ya se te pasará” creo que por la falta de luz el viejo no notó las lágrimas que no paraban de brotar, “es que no pensé que me iría a morir tan luego pué, y además así tan feo, no me sorprendería que la vieja me dejara votao y me tenga que ir solo a encontrar con San Peiro, Luchito, mi nieto mayor, hasta aquí quedaron las historias pué, aunque si usté las escribe, no se tienen por que morir, a mí no se me ocurrió nunca escribirlas, hasta que estuve ya muy viejo, y pa que, mejor las escribe ute, y aprovecha de contarlas bien, que uno viejo y guaso, harto mal que las contó”
Y así también, yo comienzo una gran historia, la mas grata historia, que no es mía, si no del viejo, la historia de su vida, la historia de su muerte, la historia de sus hijos, nietos y bisnietos, historia larga de ser contada, historia pura del historiador.

escalera al cielo ....parte dos

-“Señor, su esposa se encontraba en trabajo social esta mañana cuando se vio envuelta en un tiroteo, créame que lo siento pero debe venir inmediatamente a recoger el cuerpo, si esta confirmado que es ella, esta mañana como ya le informé, disculpe usted y créame que lo lamento”-

¿Como podría ella lamentarlo? ¿Como podría él seguir sin ella? Su vista comienza a nublarse, el leve nudo en su garganta se agranda cada vez más, tratando de salir de su organismo, le cuesta respirar pero no aminora la marcha de el auto, los recuerdos de su amada corren en su mente, besos, caricias, peleas, risas, abrazos, largas conversaciones que los mantenían despiertos por horas, podía recordarlo todo podía sentirlo, pero se desvanecían luego, todo se desvanecía, todo desaparecía en el espeso humo de su conciencia. –“no hay dudas de que es ella, está confirmado”- se repetía una y otra vez mientras dejaba de tener control sobre su cuerpo, el calor se escapa de él, y el auto apresura su marcha. Las lágrimas recorren su rostro, sin poder liberar la pena de su corazón, liberación que no suelta cadenas, opresión que solo permite respirar para mantenerse conciente

“Oooh…It makes me wonder

Oooh…And it makes me wonder”

“¿como es posible que estes muerta? Así nada mas, sin un adiós, sin más que un “te veré en la noche”, ¿como es posible que no estés?, así nada más me dejas en esta porquería de vida, así te vas a otro lugar donde no puedo acompañarte, ¿Cómo puedes ser tan egoísta? ¿Cómo puedes irte sin mí? ¡¡¡ ¿Cómo es posible que esta pena no me mate de una vez?!!!”-

Y una vez mas se hunde el acelerador, y el auto toma real peligro no sólo para él sino que para toda la gente que se encuentra en la calle, el paisaje de afuera pasa irreconocible por las ventanas, inmutable en su deformidad por la velocidad del pensamiento, del dolor que se expande como un cáncer, sin dar la posibilidad de ser amputado, más recuerdos, más promesas, más ira, más pena, más impotencia, toda mezclada con la música que llega cada vez mas cerca del clímax.

“If there's a bustle in your hedgerow

Don't be alarmed now

It's just day spring clean for the May Queen”

La sombra de la muerte sin aviso se hierge sobre todo lo que rodea al amante, lo ciega, lo confunde, todo es negro a las cuatro de la tarde, nada importa, un funeral para dos, una muerte para dos, pues sin ella el no está completo, recriminaciones al mundo, ansiedad de destrucción, cuestionamiento ante Dios.

“Dear lady can you hear the wind blows and did you know

Your stairway lies on the whispering wind”

Se divisa una luz roja, el semáforo se hace más y más claro, un cartel anuncia el edificio mas lúgubre de la ciudad “Morgue”, en el esta el cuerpo de la mujer que más ha amado en su vida, que por ayudar a los demás se vio envuelta en una de las expresiones más humillantes de el ser humano, personas matándose entre ellas por la codicia, por la desesperación, por el hambre de justicia, de igualdad, por dinero, por pobreza, por engaños, y ahora por culpa de unos pocos ha muerto lo más bello que existió jamás en la tierra, por ayudar a los demás; los demás debieran morir y ella estar viva, estar con él, y el rojo de el semáforo que no se detiene, el pie se cambia del acelerador al freno, una señora con un niño en brazos intenta cruzar, el ruido de las llantas lo ciega todo, todo se desvanece, se siente más ahogado, más desesperado, logra distinguir todo a su alrededor pero no lo entiende, la luz de su vida está muerta, no la verá mas reír, no la escuchará mas hablar, no sentirá mas su piel, no estará con ella para llorar, el silencio es sólo interrumpido por una frase que busca sin prisa su fin.

“And she's buying a stairway to heaven…”

escalera la cielo... primera parte

- Aló! …hola...si con él… ¿de dónde me llama?... ¡¿que pasó?!!... disculpe, esto ¿es una broma?... ¿está segura que es ella?... ¿cuándo la encontraron?... si por supuesto, en este momento voy para allá…muchas gracias pero no creo que lo lamente igual que yo.

Sumido en la más incomprensible frustración, sin reaccionar siquiera a lo que acababa de escuchar, por inercia sacó el auto del estacionamiento, nadie preguntó nada en la oficina al verlo salir, por la palidez de su rostro, algo malo había ocurrido.

La puerta del auto deja entrar en él a un hombre irreconocible, sumido en lo que comienza a entender, gira la llave, el motor ruge y la radio previamente programada sintoniza la estación de siempre… “seguimos así en este tiempo de clásicos con un grupo que ha marcado nuestra vida…”ella era la razón de su existir, desde que la vio

por primera vez saliendo de la universidad, solo vivía por ella, -una mujer increíble-, pensó, siempre decidida a ser mejor, siempre dispuesta a ayudar, así era su amada, así la recordaba en este momento. El paisaje se desplaza velozmente por las ventanas del auto, la radio:

“There's a lady who's sure all that glitters is gold

And she's buying a stairway to heaven”

Así son las ironías de la vida, justamente la canción que sonaba en el ambiente de esa toma en el campus, cuando se besaron por primera vez, se repetía en este momento. Lo recordaba fácilmente, como si hubiese sido una hora antes , recordaba los labios tibios de su amada, lo nervioso que se sentía, lo calmo que logro sentirse luego, podía recordar el sabor de ella, su olor esa tarde fría.

Recuerda también la manera en que se despidieron, “¿dónde te envían hoy?”Preguntó esta mañana -“a una población no muy lejos de aquí, muchos jóvenes nos necesitan ahí”- “no será peligroso amor” -“por supuesto que si, pero es mi trabajo”- “cuídate, cuídate, cuídate” mas de tres veces lo dijo esa mañana, “no te involucres” mientras la besaba con fuerza, pero sabía que eso era imposible, inevitable. Ella estaba muerta ahora, hace menos de un minuto había sacado el auto de el estacionamiento.

“In the tree by the brook there's a songbird who sings

Sometimes all of our thoughts are missgiving”